El día 13 de agosto de 2007 escribia y publicaba por vez primera, un postage que se tituló "Un blog para el arte de trenzar", dando formalmente origen y vida al blog El Trenzador. Desde aquel día han pasado casi 10 años ininterrumpidos en el cual, gracias al aporte de muchisimas personas, fue tomando cuerpo el objetivo inicial que rezaba de la siguiente manera: "este blog se constituye como un espacio de encuentro y reflexión. El objetivo será exponer técnicas, intercambiar consejos con los potenciales lectores, imágenes, analizar la historia del mencionado arte y saber cómo se lleva a cabo en otros países y culturas".
Pienso que en su momento, y hasta hoy, y porque no puede decirse futuramente, este espacio abierto para la difusión de la sogueria criolla cumplió, y hasta veces superó, ampliamente sus objetivos fundacionales. Pasada una década, y con más de 650 historias a ser contadas o tratadas, y con más de 500.000 lectores he decidido que la actualización de El Trenzador, al cuál siempre lo he sentido y tratado como "a un hijo", llegue hasta aquí. La razón de esta decisión, queridos lectores y amigos sogueros y amantes del arte del trenzar, se debe a que tengo otros proyectos a los cuales quiero dedicarme con ahínco, entre ellos el de criar como padre a mi niña, y por otro lado llevar adelante nuevos emprendimientos y proyectos de vida. Cuando inicié el blog contaba con 30 años y hoy estoy próximo a cumplir 40, y siento que ha corrido mucha agua bajo el puente y por tanto he dado todo lo mejor de mí para que el blog se ganara un espacio de reconocimiento formando parte de la vida cotidiana de los amantes y cultores de la sogueria criolla. Siempre consideré que la Sogueria criolla es, sin duda, parte del Patrimonio Inmaterial Cultural de la Argentina, y de otros países vecinos (como de Uruguay, de Chile, de Perú y del sur del Brasil) y otros un poco más distantes (como EE.UU e Australia). No obstante, El Trenzador continuará en el "aire", no tengo intención de "cerrarlo", es decir, de eliminarlo de la Web. Esta es sin duda la buena noticia, por cuenta que contiene una enorme riqueza cultural, de la cual muchos iniciantes o quien busque información sobre la sogueria criolla podrán continuar consultarlo, leerlo y apreender con él.
Quisiera que este último postage no fuera una "despedida", pues no lo es. Como reza el título de esta nota, es un "hasta luego". Pues con los amigos que he cosechado con El trenzador, nos seguiremos hablando y escribiendo. Somo casi una familia (del cual gracias a El Trenzador se me abrieron muchas puertas, literalmente lo digo, para conocer a trenzadores de todo el mundo). Quiero agradecer, con total sinceridad a todos los hombres y mujeres que participaron de este proyecto de una década. Sin ellos poco hubiera podido mantener este espacio en el tiempo pasando a convertirse en un clásico de interés general de los amantes del cuero crudo. A todos los lectores, un gran abrazo.De mi parte seguiré siempre, hasta el fin de mi vida, haciendo "guascas", no puedo vivir sin este arte. Es parte arraigada de mi persona, la cual me genera diariamente enorme satisfacción. Como no seria de otra forma, me despido con una imagen, la cual realicé hoy temprano: trenzando. Que Dios los bendiga Paisanada!
Quisiera que este último postage no fuera una "despedida", pues no lo es. Como reza el título de esta nota, es un "hasta luego". Pues con los amigos que he cosechado con El trenzador, nos seguiremos hablando y escribiendo. Somo casi una familia (del cual gracias a El Trenzador se me abrieron muchas puertas, literalmente lo digo, para conocer a trenzadores de todo el mundo). Quiero agradecer, con total sinceridad a todos los hombres y mujeres que participaron de este proyecto de una década. Sin ellos poco hubiera podido mantener este espacio en el tiempo pasando a convertirse en un clásico de interés general de los amantes del cuero crudo. A todos los lectores, un gran abrazo.De mi parte seguiré siempre, hasta el fin de mi vida, haciendo "guascas", no puedo vivir sin este arte. Es parte arraigada de mi persona, la cual me genera diariamente enorme satisfacción. Como no seria de otra forma, me despido con una imagen, la cual realicé hoy temprano: trenzando. Que Dios los bendiga Paisanada!